Primero, un poco de historia

¿Sabías que los primeros alfileres datan de la prehistoria?
¡Eran fabricados con espinas de pescado o astillas de madera!

Los sumerios fabricaban alfileres rectos de hueso y de hierro.

A partir del siglo XVI se conocen los primeros alfileres fabricados en latón.

Y así, los alfileres han ido evolucionando hasta llegar a nuestros días, donde podemos encontrar gran variedad de ellos según la utilidad que queramos darles.
¿Nos acompañas a hacer un repaso?

Según wikipedia, el alfiler (del árabe: alẖilál) es un clavillo que es usualmente de metal con punta por uno de sus extremos y una cabecilla por el otro. Tiene múltiples funciones, entre ellas sujetar ciertos objetos o materiales entre sí.

Alfileres de modista

Son los de «toda la vida».
Suelen ser cortos y finos y su cabeza es del mismo material.
Los mejores son los de acero, que no se doblan (pero sí se parten, es la forma de comprobar que son buenos)

Su medida varía entre 26mm y 35mm de largo.

Alfileres con cabeza de vidrio o Quilting

Son largos y finos, fáciles de encontrar en el tejido por su cabeza redondeada, gruesa y de colores.
Son perfectos para sujetar el tejido y coser a máquina o planchar porque son termoresistentes.
Son los ideales para trabajos de patchwork.

Alfileres con cabeza de perla

Son más largos y con la cabeza más grande que los alfileres de modista.
Suelen utilizarse para manualidades, patchwork y costura en general.
Hay que tener cuidado porque aunque antes la cabeza era de perla o cristal, actualmente suelen ser de plástico y ¡no aguantan el calor de la plancha!

Alfileres de cabeza plana

Son alfileres de acero más finos y más largos que los normales, en la parte superior tienen una cabeza (los encontrarás de diversas formas).
Son muy utilizados para realizar labores de patchwork.

Si no te gusta sobrehilar, puedes utilizarlos para coser a máquina, pero colocándolos de forma perpendicular a la costura.

Imperdibles

Imperdibles

¿Sabías que los imperdibles son alfileres?

Pues sí, es un tipo de alfiler con un extremo en forma de gancho para guardar en él su punta.
Tiene dos funciones:
Una, evitar que se abra
Dos, prevenir heridas accidentales al usarlo en la ropa.

Como curiosidad te diremos, que se utilizan tanto como accesorio de vestimenta como de pendiente.

Y colorín colorado, el recorrido por los alfileres ¡a terminado!

Esperamos que te haya gustado y nos leas en la siguiente entrada.

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