Hola Soñadora, hoy hablaremos sobre un paso muy importante a la hora de coser nuestra ropa ¡la prueba!
Es importante que antes de dar la costura definitiva, nos probemos bien para comprobar que nos queda como un guante.
Tanto si utilizas el patrón de una revista como de una patronista, y aunque tus medidas coincidan al dedillo con la tabla de medidas, siempre hay que probarse porque es posible que tengas que hacer algunas pequeñas correcciones.
Por esto es importante hilvanar bien todas las pinzas y costuras.
¿Sabes que algunas máquinas modernas tienen la opción de hilvanar? Consulta las instrucciones de tu máquina que igual te llevas una sorpresa.
Aunque me llamen loca, a mí ¡me encanta hilvanar! jeje.
¿Cuándo puedes «pasar» de probarte? Cuando ya has hecho el mismo modelo en una tela igual o muy similar, pero oye, que no cuesta nada.
Es más, si es un modelo más «especial» o con una tela más cara ¡hazte el modelo de prueba en retorta o en algún tejido más económico!
Antes de hilvanar
Vamos a preparar la prueba, y antes de hilvanar hay que colocar la entretela en todas las piezas que lo necesiten ya que de lo contrario, la tela sufre algunas modificaciones.
Si alguna de las piezas del patrón lleva pinzas, frunces, embebidos… tienes que hacerlos para que la prueba sea lo más realista posible ¡no nos gusta descoser!
El hilván
Para hilvanar las piezas lo mejor es utilizar un hilo adecuado, el hilo de hilvanar de algodón está hecho para ello. Lo puedes encontrar tanto en color natural como en distintos colores, lo que hace más fácil de diferenciar tanto del tejido como de los «hilos flojos»
Lo que siempre me han enseñado es hilvanar desde las puntas hacia el centro, haciendo coincidir todas las marcas que tengamos en el patrón.
Si quieres, puedes planchar las costuras abriéndolas, pero siempre a temperatura baja y sin marcar demasiado por si tienes que corregir alguna costura.
¿Es necesario hilvanar las cremalleras?
A ver, aquí hay quien dice sí y quien dice no.
Yo creo que para una prenda de diario no es necesario siempre y cuando te «apañes» sujetando tú la pieza bien donde iría el cierre. Pero, si te sientes más cómoda hilvanarla te va a costar realmente poco.
Vamos a por la primera
No es lo mismo coser para una misma que coser «para fuera».
Cuando coso para mí, voy hilvanando, probando y cosiendo cada parte. Pero, cuando coso para otros sí que monto la pieza entera porque ¡pilla tú a mis hijos para probarse!
En la primera prueba, intenta ponerte el calzado que tengas pensado utilizar si es un vestido, falda o pantalón porque no solo varía el largo, también la postura.
Si es un suéter, sudadera, chaqueta o demás, ponte debajo la ropa que suelas llevar porque variará el ancho y largo.
También es importante probarte con sujetador, si lo usas de diario.
Posibles fallos y soluciones
Nos vamos a ayudar de la Guía de Costura de Burda para ilustrar los posibles fallos y soluciones de nuestra primera prueba, no te agobies, que nadie es perfecto y con unos arreglillos te va a quedar una prenda fabulosa.
Me queda ancho, si es poco lo arreglas reduciendo por igual en las costuras laterales. Si es más de 4 centímetros ¡comprueba que es tu talla de patrón!
Me queda estrecho, para eso dejamos siempre un margen de costura ¡aprovéchalo!, si con el margen de costura no tienes suficiente, comprueba tu talla en el patrón.
Recuerda que si necesitas tallas distintas según las zonas tenemos una serie de publicaciones para ayudarte a ajustar los patrones a tu talla 😉 ¡a repasar!
Me tiran las sisas (o el escote) Lo más socorrido es dar unos piquetitos en las zonas curvas pero ¡cuidadito no te pases! recuerda que necesitas el margen de costura también para pulir las vistas o las mangas.
Me hacen arrugas las sisas (o el escote), suele ocurrir cuando se tienen los hombros caídos, lo más fácil es reducir el largo que nos sobra de los hombros desde la parte superior de la sisa hasta el escote o, ponerte unas hombreras (a mí no me gustan nada, menos mal que pasó esa moda).
Se me sube el escote, tus hombros son rectos y te «tira» el escote. Al contrario que en el caso anterior, hay que sacar el largo necesario desde el extremo del hombro hacia el escote.
La pinza no va en la dirección correcta, puede ser por la posición del pecho por ejemplo, no pasa nada porque podemos trasladar la pinza hacia arriba o hacia abajo desde la costura lateral.
Se me levanta el escote ¡solución de emergencia!, hay que soltar el hilván de los hombros y recolocar el delantero hacia las sisar de manera que nos quede bien el escote.
Dependiendo del margen de costura que hayamos dejado en los hombros podremos dejarlos como estaban o tendremos que modificar el ancho.
Me hace arrugas laterales a la altura del pecho, con un poco más de largo delantero se soluciona.
Si el modelo lleva pinzas, hay que aumentarles la profundidad. Soltamos los hilvanes de las costuras laterales desde el bajo hasta casi la pinza y le damos a la pinza la profundidad necesaria para que ajuste bien.
De esta manera se acorta el lateral del delantero y tendremos que ajustar con el margen aunque el acabado puede variar.
El canto de la botonadura se superpone en diagonal, indica que necesitas aumentar el largo delantero o que la pinza no es lo bastante profunda.
Lo corregiremos igual que en el caso anterior.
Los cantos inferiores de la botonadura ¡se abren!, esto es porque la pinza es demasiado profunda o ha cedido la tela.
Haremos lo contrario que en los dos casos anteriores.
Descoseremos las costuras laterales y haremos las pinzas más estrechas.
En este caso, la costura lateral del delantero se queda más larga y también tenemos que ajustar la diferencia en el dobladillo.
Se me abren los cantos de la abertura posterior, puede ser porque tienes culo carpeta o porque tu espalda ya se curva hacia delante y por eso la falda cae un poco hacia atrás.
No pasa nada, el largo sobrante lo reducimos en la costura donde ponemos la pretina con un pliegue transversal que haremos en disminución hacia la costura lateral.
Se me forman arrugas transversales en la espalda, esta solución es fácil, solo hay que hacer un pliegue transversal para eliminar el largo sobrante.
Eso sí, haz la modificación primero en el patrón de papel y luego lo pasas a la tela.
La falda es «cortita de alante y larguita de atrás» (¿Has cantado?, eres mayorcita jeje)
Hay que sacar la pieza delantera de la falda en la costura de aplicación de la pretina desde el centro hacia las costuras laterales.
Si no tienes suficiente margen de costura en la parte superior, puedes subir la pieza posterior de la falda por el centro.
Mi falda se queda corta en la parte posterior, es por una postura inclinada hacia delante o un pompis generoso.
Acortaremos un poco la pala delantera en disminución hacia las costuras laterales mientras aumentamos un poco el largo en la pala posterior.
El cuello es demasiado plano, se soluciona dando unos piquetes en el canto exterior y montaremos unos sobre otros.
El cuello es demasiado alto, aquí modificaremos al contrario, daremos los piquetes en el canto exterior y aumentaremos las aberturas con entretela.
Me queda ancho de hombros, la solución es elevar la copa de la manga. Si no tenemos suficiente margen de costura, puedes cortar las mangas dando más profundidad.
Me queda estrecho de hombros, aquí tendremos que acortar la copa de la manga.
Me queda ancho de manga, hay que estrecharla con alfileres hasta ajustar el ancho.
Luego hay que hacerla coincidir con la sisa estrechando en el cuerpo la costura lateral o escotar la manga.
La manga es demasiado estrecha, esto le pasa a mi hija con la calistenia, hay que aumentar el ancho en la costura de la manga y aumentar o escotar la sisa.
Peero, ten en cuenta que las sisas profundas son más incómodas porque se sube la prenda al levantar el brazo así que no es recomendable escotar la sisa más de 1 centímetro.
Me queda largo de mangas, seguro que vas a acortarlo de la orilla y puedes si no excede de 2 centímetros. Si te sobra más tendrás que hacerlo en un pliegue transversal a media altura del brazo.
¿No quieres que se vea el pliegue? haz la modificación en el patrón de papel y pásalo luego a la tela.
Otros ajustes
Para hacer la prueba de bolsillos, trabillas y otros elementos, es recomendable fijar la pieza de papel en la tela, de esta manera verás el efecto y podrás modificar tanto la posición como el tamaño o la forma.
Importante también es hacer coincidir el botón de una camisa o vestido a la altura del pecho ¡evitarás que se abra!, es fácil si lo haces en la misma línea del vértice de la pinza pero, no obstante, ¡márcalo en la prueba!
Las mangas son algo que también necesitan algunos ajustes según los problemillas que puedan darnos.
Si hay bolsas en la copa de la manga es que es demasiado alta, con subirla un poco hacia la costura del hombro ¡solucionado!
Si la arruga es en diagonal y hacia abajo es que la copa es corta y tendremos que escotar la manga en la sisa.
Si la arruga es de atrás hacia delante, será suficiente con subir un poco el ancho de la mitad posterior de la manga.
Por último, si las arrugas se forman de delante hacia atrás, gira un poquito la manga hacia la parte de la espalda.
El modelo definitivo
Una vez que has realizado la prueba tienes que pasar todas las modificaciones a la tela para hacer las correcciones, si lo necesitas ¡ayúdate del hilván!
Antes de dar la prenda por finalizada y antes de hacer los dobladillos de los bajos de las prendas o de las mangas (es mi consejo), vuelve a probar.
Para los dobladillos lo mejor de lo mejor es el puntímetro porque te quedarán unas orillas muy igualitas y preciosas.
Marca el dobladillo con un hilván y prueba con el calzado que vayas a utilizar si es para un evento o con el que suelas llevar si es para diario.
Y ahora sí ¡ya tenemos un modelo que nos ajusta a la perfección!
Como ves la prueba es necesaria para comprobar todas las medidas y piezas del patrón y ajustarlas a nuestro maravilloso body.
Además, ¡aprovecha para experimentar con distintas costuras y acabados antes de dar la puntada final!.
También hemos podido comprobar que el margen de costura y el hilván son grandes aliados para la confección de nuestras prendas únicas.
¿Qué? ¿Te vas animando a coser tu propia ropa?
Ya te aviso que voy a seguir dándote tips y consejos para que ¡te lances a la aventura de la moda única y sostenible!
Y no te agobies que en palabras es mucho más complicado que en tela e hilo jeje.
No me falles que te espero en la siguiente publicación.