Hola Soñadora, ya sabes que siempre queremos ofrecerte información útil para todos tus proyectos de costura y hoy, en nuestra serie de los cierres para costura ¡te hablamos de los cierres de presión!.
Estos pequeños y versátiles cierres que han ganado popularidad gracias a su estética y su practicidad.
¿Nos acompañas a descubrir más sobre ellos? ¡Empezamos!
¿Qué son los cierres de presión?
Los cierres de presión son un par de discos (de metal o plástico) que se utilizan en lugar de botones,
Hay diferentes tipos que pueden coserse o remacharse con un alicante especial o con un martillo.
Estamos seguros que los has utilizado o, al menos, los has visto en alguna ocasión.
El origen de los cierres de presión
Los cierres de presión, más conocidos como snaps, fueron inventados en 1885 por el alemán Heribert Bauer.
Aunque hoy en día los más utilizados son de plástico, originalmente eran de metal y se usaban básicamente para los cierres de los guantes peeero su simplicidad y seguridad pronto los hicieron populares en otras prendas de ropa y accesorios.
La evolución de los cierres de presión
A lo largo de los años, los cierres de presión han experimentado numerosas mejoras y variaciones.
En la década de 1950, se empiezan a fabricar de plástico y se introducen en la moda infantil y prendas deportivas por su ligereza y resistencia.
En la actualidad tenemos cierres de presión en distintos materiales, tamaños y colores haciéndolos ideales para múltiples proyectos de costura.
Tipos de cierres de presión
Veamos algunos tipos de cierres de presión, cada uno con unas características y perfectos para distintos usos:
Los cierres de presión metálicos, son perfectos para prendas que necesitan más resistencia como chaquetas, bolsos o mochilas.
Estos cierres proporcionan una sujeción firme a la vez que le dan un toque de estilo más industrial.
Los cierres de presión de plástico son ideales para ropa infantil y proyectos ligeros. Además están disponibles en una amplia variedad de colores y de formas.
Los cierres de presión magnéticos son muy utilizados en bolsos y accesorios ya que ofrecen una sujeción tan discreta como cómoda.
Usos de los cierres de presión
Como ya te hemos comentado, hoy en día los cierres de presión son muy versátiles y se utilizan en una amplia gama de productos, como por ejemplo:
Ropa infantil, tanto de bebé como de niño, estos cierres son perfectos por su facilidad de abrir y cerrar para sus pequeñas manos.
Son cierres muy utilizados en varios tipos de accesorios como bolsos, carteras o mochilas por ser un cierre tan seguro como rápido de utilizar.
En ropa deportiva como chaquetas y pantalones deportivos, son utilizados por su durabilidad y resistencia.
Son unos cierres utilizados en muchos proyectos DIY en decoración de hogar como fundas, cojines y otros artículos ya que son fáciles de utilizar y dan un acabado profesional.
Cómo colocar los cierres de presión
Aunque al principio te puede parecer algo complicado colocar los cierres de presión, solo necesitas las herramientas adecuadas y un poco de práctica ¡es muy sencillo!.
Ya hemos visto que hay distintos tipos, tenemos los de plástico que se cosen y solo necesitan hilo y aguja igual que algunos magnéticos y los de plástico o metal que se ponen con alicate o aplicador.
No, no necesitas el mismo aplicador para uno que para otro, el aplicador de cierres metálicos también nos sirve para colocar ojetes u ollaos ¡dos por uno!
Para los conocidos como «snaps» necesitas su aplicador y un punzón que suele ir en el mismo pack.
Hay muchos tutoriales para aprender a colocarlos, nosotros en los proyectos que los usamos te enseñamos a colocarlos.
Nuestra conclusión
Los cierres de presión son una opción genial para múltiples proyectos de costura, y son ideales para evitar coser botones y hacer ojales en algunas camisas o chaquetas.
Si no los has utilizado todavía ¡te animamos a probarlos!
Si ya los utilizas, no dejes de pasar por la tienda para ver nuestra variedad.
Nos vemos en la próxima entrada ¡te esperamos!