Hola Soñadora, seguimos nuestro recorrido entre los tejidos y hoy ¡conocemos la viscosa!
Es un tejido que seguramente ya conoces o, al menos, has oído nombrar, vamos a conocer más de su origen y evolución y, por supuesto, te daremos consejos para sus cuidados e ideas para coser cositas con ella ¡empezamos!
¿Qué es la viscosa?
La viscosa es una fibra semisintética fabricada a partir de pulpa de madera y algodón.
Es conocida por su suavidad y caída que la hacen la más elegida para confección de prendas de vestir y textiles de hogar.
Un dato curioso, hay quien la llama rayón pero ¡no es lo mismo! son dos tejidos diferentes ¿te apetece una entrada dedicada al rayón?
Su diferencia principal radica en su proceso de fabricación y producción. ¡Sorpresa!, el rayón es más respetuoso con el medio ambiente ¿sorprendida?
Más curiosidades la fibra de celulosa con la que se obtiene la viscosa procede del bambú, el eucalipto o el pino.
¿Cuál es el origen de la viscosa?
En primer lugar queremos aclarar que no es lo mismo el rayón que la viscosa, aunque para otras personas sí lo es para nosotros son dos tejidos distintos.
El rayón, conocido como seda artificial, tiene su origen en la China de finales del siglo XIX.
La viscosa se produce por primera vez en la década de 1890 y se le llamaba seda vegetal.
En realidad, la viscosa es una variante del rayón como también lo son el modal y el lyocell.
Por supuesto, dedicaremos entradas tanto al rayón como al modal y al lyocell porque nos encanta conocer los tejidos.
La viscosa inicia su fabricación con el xantato de celulosa que es un material que se retira de las paredes celulares de la planta.
Con este proceso se obtiene un líquido viscoso (de ahí el nombre de «viscosa») que luego es procesado para convertirlo en una fibra similar a otras fibras naturales pero con otras características.
¿La viscosa es un tejido sostenible?
Ya sabes que nos preocupa y mucho el medioambiente, y sí, el proceso de fabricación de la viscosa como el de otros tejidos puede ser perjudicial para el medioambiente si se produce en masa, ya sabemos que nada es bueno en exceso.
Por una parte, al obtenerse de maderas y fibras naturales puede provocar una deforestación.
Por otra parte, para su producción se utilizan productos químicos tóxicos contaminantes.
Por no decir que utiliza mucha agua.
Por esos motivos, debemos tener la precaución de ver las etiquetas y ver si son tejidos fabricados con certificado, como el OEKO TEX.
Cuidado, no estamos diciendo con esto que la viscosa sea un tejido «malo», porque la mayoría de los tejidos también utilizan mucha cantidad de agua (por muy naturales que sean), lo que decimos es que no debemos comprar tejidos fabricados en masa sino bajo un control.
Por la parte «positiva» te diremos que la viscosa es un tejido biodegradable.
Como ya sabemos, el tejido más sostenible es el que ya existe por lo que hay que evitar el consumo rápido de esta sociedad.
Cose tu ropa, cuídala y consérvala todo lo posible y, cuando ya no puedas más ¡recicla, reutiliza o dona tus prendas para una segunda vida!
¿Qué características tiene la viscosa?
La viscosa tiene un aspecto similar a la seda con una textura que se asemeja al algodón.
Lo que está claro es que es un tejido muy versátil y asequible.
Además es un tejido hipoalergénico y muy transpirable lo que la hace muy indicada en climas cálidos porque nos ayuda a mantenernos frescas.
Tiene una extraordinaria capacidad para no atrapar el calor y evacuar el sudor.
Y no te creas que solo vale para climas cálidos, porque tampoco sufrirás frío a bajas temperaturas ¡por eso cada vez es más utilizada durante todas las estaciones del año!
Es un tejido ideal para prendas con caída y movimiento.
Y, también es un material fácil de teñir que mantiene el color después de un uso continuo.
¿Para qué se utiliza la viscosa?
La viscosa es un tejido muy versátil, a pesar de que la mayoría de la gente piensa que su uso se limita a blusas o camisas.
Si bien es cierto que su uso en la confección de ropa es el más extendido ¡no es todo!
Es cierto que un vestido, falda, camisa, pantalón o mono con viscosa es como de otro mundo por su suavidad y fluidez, pero también una pañuelo o una bufanda va a quedarte genial.
Atrévete a utilizarla como textil de hogar, porque su textura suave y sus vibrantes colores ¡te van a enamorar!
No, no pienses que es un tejido delicado, porque te va a aguantar el trote en un cojín o en un bolso.
¿Sabes lo espectacular que queda un mantel con sus servilletas con la caída de la viscosa? Por no hablar de las cortinas ¡que vuele tu imaginación!
¿Qué cuidados requiere la viscosa?
Como ya te hemos dicho la viscosa, pese a lo que pueda parecer, es un tejido fácil de cuidar y de gran durabilidad, pero como todo en esta vida ¡hay que saber cuidarlo!
Puedes lavar la viscosa en la lavadora, siempre te recomendaremos que laves tus tejidos en agua fría (máximo 30 grados) y del revés.
Del mismo modo que te recomendaremos que no utilices suavizante.
No es bueno el uso de la secadora, como regla general para ningún tejido porque se estropean las fibras.
Y la viscosa es un tejido de secado rápido.
También te diremos siempre que la seques al aire y no la expongas directamente al sol.
¿Se plancha la viscosa? pues sí, es un tejido que se arruga cuando se lava pero también es un tejido que con «ver» la plancha se alisa.
Utiliza una temperatura adecuada y verás como la plancha se desliza y lo tienes listo en un santiamén.
Nuestras conclusiones sobre la viscosa
La viscosa es un tejido maravilloso que te ofrece muuuchas ventajas.
Su origen natural junto con los avances tecnológicos hacen de la viscosa una tela versátil y accesible para multitud de proyectos, con lo que te animamos a probarla si aún no lo has hecho.
A pesar de no ser un tejido muy sostenible, tampoco es de los malos porque es más sostenible que los tejidos químicos.
Es cómoda, transpirable, refrescante, regula la humedad y ¡esa caída y tacto enamoran!
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