En este momento estás viendo Explorando la chenilla, el tejido que causa furor por su elegancia y versatilidad! ¡No podrás resistirte!
Explorando la chenilla, el tejido que causa furor por su elegancia y versatilidad! ¡No podrás resistirte!

Explorando la chenilla, el tejido que causa furor por su elegancia y versatilidad! ¡No podrás resistirte!

Hola Soñadora , hoy vamos a sumergirnos en el fascinante mundo de la tela de chenilla.
¿Nunca has oído hablar de ella? ¡No te preocupes si tu respuesta es no porque vamos a descubrir qué es y en qué la puedes utilizar ¿Te vienes?

¿Qué es la chenilla?

La chenilla es un tejido suave al tacto, de apariencia similar al terciopelo pero con una textura más tupida y de mayor grosor.
Pero no solo es un tejido, también es el hilo con el que se pueden realizar distintos trabajos tejidos.
Aunque se puede hacer con gran variedad de fibras diferentes, suelen ser de algodón, seda, lana y rayón.

La historia de la chenilla

La chenilla tiene una historia y un proceso de fabricación únicos.

La chenilla se introdujo por primera vez en la industria textil en el siglo XVIII, en la década de 1870.
Fue a principios del siglo XIX en Escocia cuando se desarrolló un método que permitió producir la chenilla en grandes cantidades.
A partir de 1930 se populariza en Europa con la entrada en los hogares principalmente en forma de alfombras, mantas y colchas.
En el mundo de la moda, la chenilla entra con fuerza a partir de 1970 principalmente como parte de la ropa de abrigo femenina.

En la actualidad, la chenilla ha evolucionado con la tecnología textil.
Hoy en día se encuentra en una gran variedad de colores y dibujos e incluso se han desarrollado opciones más sostenibles utilizando materiales reciclados y procesos de fabricación que minimizan el impacto ambiental ¿lo sabías?

¿Cómo se hace la chenilla?

La chenilla se obtiene entrelazando hilos de seda, algodón o lana en un telar especializado.
Con esta técnica de entrelazado se consigue una superficie esponjosa y muy agradable al tacto.

Hoy en día hay un proceso de producción estandarizado para la chenilla mediante el cual se colocan trozos cortos de hilo entre dos hilos centrales para luego retorcerlos.
Estos hilos enrollados van formando lazos que luego se cortan creando el aspecto típico de la chenilla.
Para evitar que estos nudos se aflojen se pone nylon en el núcleo del hilo y se cuece al vapor y, por último, el hilo se teje para formar la tela de chenilla.

La tela de chenilla se ve diferente según la dirección porque las fibras reflejan la luz de forma distinta.

Características de la chenilla

Una de las características más destacables de la chenilla es su capacidad para absorber y retener el calor, por lo que se utiliza mucho en prendas de invierno como abrigos, chaquetas, cuellos o bufandas.
También se utiliza en indumentaria regional y en decoración de hogar con cojines, cortinas, mantas, colchas, edredones o tapizados entre otros.
Tiene un toque elegante que es ideal para cualquier ambiente.

Otra ventaja de la chenilla es su resistencia y durabilidad.
Al estar hecha por hilos entrelazados no suele romperse con facilidad, por lo que es ideal para tapizar muebles ¡resiste el día a día y mantiene el tipo!

Como inconveniente te diremos que son incompatibles con mascotas porque se estropean con los araraños y retienen el pelo y, que no se puede planchar ¿eso es un inconveniente?

¡Ah!, ni se te ocurra utilizarla en exteriores porque se daña con el sol.

¿Sabías que la chenilla es un tejido absorbente?, pues sí, absorbe los líquidos y los retiene.

Los cuidados de la chenilla

La chenilla es un tejido fácil de mantener, aunque no lo creas.
Puedes lavarla a máquina, eso sí, con cuidado de temperatura y revoluciones en el centrifugado.

La chenilla es un tejido resistente a las manchas ¡no es inmanchable! pero con un paño limpio y agua jabonosa suelen salir las manchas.

¿Qué puedo hacer con chenilla?

La chenilla es un tejido todoterreno, con ella puedes hacer confección de ropa, de accesorios y hasta de hogar.

Es muy utilizada para tapizar, alfombras, mantas, edredones, colchas, cortinas, cojines, abrigos, capas, bufandas, bolsos, ¿se te ocurre algo más?

En definitiva, la tela de chenilla es una auténtica joya en el mundo de los tejidos.
Su suavidad, calidez, resistencia y versatilidad la convierten en una elección perfecta tanto para prendas de vestir como para elementos decorativos en el hogar.
¿Te animas a incorporarla en tu vida?
Estamos seguros de que te enamorarás de esta maravillosa tela y, por supuesto, la tenemos disponible para ti en nuestra tienda online.

¡Te esperamos la próxima semana!

Deja una respuesta